Tu casa a prueba de gatos
Trucos y consejos qué hacen la vida de tu curioso bigotudo más segura.
Pon lejos de su alcance juguetes y cosas pequeñas: bolas, trozos de tela y tetillas de los biberones.
Guarda todas las medicinas y productos de limpieza en un lugar cerrado.
Cierra la puerta del baño sobre todo cuando vayas a llenar la bañera.
Baja siempre la tapa del W.C.
Manten los objetos fibrosos o con hebras fuera del alcance de tu felino, a menos que lo estés vigilando. Cordeles, hilos, o hebras (con las agujas de coser) pueden resultar mortales si se tragan.
Si tienes chimenea, asegúrate que la barrera protectora esté ajustada firmemente.
Cierra las ventanas, tu gato puede saltar desde las ventanas si están abiertas.
Normalmente, los gatos suelen apoyarse en las mosquiteras de las ventanas cuando duermen la siesta, así que debes asegurarte que las mosquiteras estén en buenas condiciones y cerradas.
Cierra bien las puertas de los electrodomésticos. El calor de la secadora puede atraer a los gatos que buscan un sitio caliente para una siesta. Antes de conectar un electrodoméstico, asegúrate que está vacío.
Cuando abras latas o botes de aluminio, colócalos de inmediato en un lugar seguro o en contenedores que tengan una tapa segura. Los bordes de las latas son muy afilados y pueden cortar la lengua de tu gato.
Asegúrate que las plantas de tu casa o jardín no son tóxicas para tu gato. Lirios, muérdago, poinsettia, aloe vera, eucalipto, helecho, crisantemo, narciso, acebo y el tulipán son algunas de las plantas que son perjudiciales. Por supuesto, olvídate de ponerlas pesticidas.
Si tienes garaje, guarda en un lugar cerrado todos los productos químicos.
¿Es tu casa segura para tu gato?, ¿puedes darnos alguna recomendación más?
