Qué hacer ante una fuga de gas
El gas es un elemento muy común en nuestras viviendas. Generalmente las instalaciones son seguras y por tanto sólo en contadas ocasiones ocurren accidentes, pero como más vale prevenir que curar, y es importante saber cómo actuar ante cualquier tipo de situación peligrosa, vamos a explicarte qué debes hacer si piensas que hay una fuga de gas en tu hogar.
¿Cómo lo vas a detectar? Vayamos del caso más extremo al más normal. Si entras en tu casa y huele a gas de forma intensa, no puedes respirar bien y/o escuchas el sonido de la fuga de gas desde el conducto, sal inmediatamente. No trates de cerrar ninguna llave, no llames por teléfono desde el lugar, no pierdas tiempo recogiendo nada: márchate del piso y avisa a tus vecinos. Tampoco enciendas la luz ni por supuesto, cualquier tipo de fuego. El gas es extremadamente inflamable. Ya en la calle, llama a los bomberos. Ellos sabrán que hacer. Si la situación consiste en que notas un leve olor a gas, abre las ventanas de par en par y mira si los fuegos de la cocina pueden estar abiertos, o incluso si estando cerrados, dejan salir algo de gas. Tanto si tienes bombona como cualquier otro tipo de instalación, cierra la llave de paso para asegurarte de que no salga más. Algunos electrodomésticos, como las secadoras, pueden funcionar con gas. Compruébalo también. Si el olor persiste y estás convencido de que no procede de tu hogar, avisa al responsable de la comunidad y buscad la vivienda de la que surge el olor. Igual que antes, si es excesivo, o si simplemente no sabes valorar si es demasiado intenso, salid y advertid al resto del edificio, a continuación, llamad a los bomberos.
Lo último ya es reparar la avería. A no ser que seas un experto, sin duda lo mejor es que contactes con un técnico. Podrías cometer algún error y ponerte a ti y a tus vecinos en peligro. Ante todo, mantén la calma y actúa de manera responsable y precavida.
